Siguiendo las recomendaciones del Comité europeo para la evaluación de riesgos en farmacovigilancia (PRAC), la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) recomienda no utilizar los contrastes lineales disponibles en España (los que contienen ácido gadobénico y gadodiamida) y utilizar el resto de contrastes con gadolinio a las dosis más bajas posibles.
Recientemente, el PRAC ha finalizado la revisión que venía llevando a cabo acerca de la acumulación de gadolinio en ciertas áreas cerebrales tras exposición a contrastes que contienen este metal. La FDA comenzó hace años una evaluación de este riesgo (Publicado en Julio 2015), tras una investigación de la Clínica Mayo que demostraba que tras la administración de contraste (gadolinio) en pruebas de Resonancia Magnetica, este contraste queda depositado en los tejidos cerebrales de por vida (Publicado en Marzo 2015).
Estos contrastes, utilizados para mejorar la calidad de las imágenes obtenidas a través de resonancia magnética (RM), pueden clasificarse en dos grandes grupos: lineales (ácido gadobénico, gadodiamida, ácido gadopentético, gadoversetamida y ácido gadoxético) y macrocíclicos (gadobutrol, ácido gadotérico y gadoteridol).
En España se encuentran comercializados actualmente los siguientes agentes de contraste con gadolinio:
-Con ácido gadobénico: Multihance (NO RECOMENDADO SU USO)
-Con gadodiamida: Omniscan (NO RECOMENDADO SU USO)
-Con ácido gadoxético: Primovist
-Con gadobutrol: Gadovist
-Con ácido gadotérico: Dotarem
-Con gadoteridol: Prohance
El PRAC considera que el beneficio de la administración intravenosa de los siguientes agentes de contraste lineales no supera a sus riesgos: ácido gadobénico, gadodiamida, ácido gadopentético y gadoversetamida y recomienda su suspensión de comercialización. Estos agentes presentan una estructura que les confiere una mayor probabilidad de liberar gadolinio.
El balance beneficio-riesgo de los agentes de contraste macrocíclicos (gadobutrol, ácido gadotérico y gadoteridol) se considera favorable, siempre y cuando se utilicen a la menor dosis posible y cuando otras pruebas diagnósticas no se consideren adecuadas.
Mientras se adopta una decisión final, la AEMPS recomienda a los profesionales sanitarios como medida de precaución, respetar las recomendaciones del PRAC siempre que sea posible.